La Calle del Balç reabre sus puertas y estrena las mejoras en su urbanización e iluminación
La actuación ha tenido un presupuesto de 359.273 euros (IVA incluido) y ha consistido en la renovación de las redes de servicios, la mejoría de la accesibilidad y la renovación del pavimento. Con las obras, se han identificado y documentado tramos de cloacas y pavimentos de los siglos XVII y XVIII, algunos de los cuales se han podido dejar a la vista de los visitantes. Del 1 al 5 de diciembre la calle se podrá visitar de forma gratuita.
El alcalde de Manresa, Marc Aloy Guàrdia, y el regidor de Turismo y Proyección de Ciudad, Joan Calmet Piqué, han dado a conocer este miércoles el resultado de las obras realizadas los últimos meses para mejorar la urbanización de la Calle del Balç, una de las joyas del patrimonio turístico e histórico de la ciudad, ubicado en el Centro Histórico.
La intervención ha consistido en la retirada del pavimento existente, la excavación y construcción de una nueva explanada, la renovación de las redes de cloacas, agua, electricidad y telecomunicaciones y, finalmente, la construcción de un nuevo pavimento, hecho con piedra de la Sénia guijarros del río sobre una cama de mortero. También se ha renovado la iluminación, con unos nuevos puntos de luz que resaltan la belleza de la calle.
Se ha urbanizado una superfície total de 479,31 m2, por un coste de 359.273,62 euros (IVA incluido), de los cuales 210.813 euros han sido aportados por el Ayuntamiento de Manresa y 148.461 euros por Fondos europeos FEDER.
La Calle del Balç es un pasaje de trazado irregular y sinuoso, con tramos escalonados adaptados a la topografía existente y con la presencia de numerosos tramos cubiertos. Esta última característica, generada por la presencia de numerosos soportales construidos entre las casas de ambos lados de la calle - y que servían para aprovechar el escaso espacio que había al interior de la ciudad amurallada-, la convierten en una calle medieval casi única en Cataluña.
El 1987 se hizo una importante intervención de reforma de este vial medieval, que renovó parte del pavimento, las puertas que lo cierran y el alumbrado público para abrirlo al público. La construcción y apertura del Centro de Interpretación de la Calle del Balç motivaron un nuevo conjunto de obras que finalizaron en el año 2011.
Se recuperan tramos de pavimento de los siglos XVII y XVIII
Con las obras de urbanización de la Calle del Balç se han identificado y documentado tramos de cloacas y pavimentos que se pueden datar entre los siglos XVII y XVIII, todos ellos en un estado bastante fragmentario.
Una vez documentados, una parte de los restos que se han conservado han sido cubiertos por el nuevo pavimento, mientras que otras se han dejado al descubierto y se han integrado en la obra que se ha hecho para que puedan ser interpretadas por los visitantes.
Es el caso de uno de los tramos de cloacas del siglo XVII-XVIII que se encuentra en buenas condiciones, juntamente con un fragmento de pavimento de guijarros que se entrega a ella y que corresponde al acceso de uno de los edificios de la calle. Se ha iluminado y protegido este conjunto con una barandilla para evitar accidentes a los visitantes.
Además, al final de la calle en dirección a la calle de Sobrerroca y en el callejón que sale del centro de interpretación y baja hacia la calle de Santa Llúcia, se han conservado parte de los enlosados con piedras y parte de la alineación central de losas utilizadas como cubierta del conducto de servicio de desguace. Estos restos tienen una cronología moderna, entre los siglos XVII-XIX.
Desde hoy hasta el domingo se puede visitar de forma gratuita
Con la finalización de todas las mejoras, el Balç está preparado para retomar su actividad. Se podrá visitar los lunes, domingos y festivos de 10 a 14 h. De martes a viernes de 10 a 14 h y de 17 a 19 h. Sábados de 10 a 14 h y de 17 a 20 h.
Desde hoy miércoles hasta el domingo, 5 de diciembre, se podrá visitar de manera gratuita. El precio de la entrada general será de 5,5 euros. La entrada reducida para jubilados y niños de 8 a 16 años será de 4,5 euros, mientras que el precio de la entrada sin la visita al Centro de Interpretación será de 3 €.
Desde Manresa Turismo ya se trabaja para organizar diferentes propuestas de dinamización. En primavera está previsto estrenar un Escape Room de temática medieval, que estará disponible cada día de apertura y será compatible con la visita habitual al Centro. Actualmente está en fase de pruebas y diseño de los espacios.
Así mismo, se programaran talleres de hierbas medicinales, dos veces al año, durante el invierno y el otoño; visitas teatralizadas; juegos de rol para familias para la primavera y el verano; y talleres de Navidad durante el diciembre de 2022.
El trazado de una calle de origen medieval
La Calle del Balç es un espacio de gran interés histórico. Esta calle se debe ubicar en el contexto del urbanismo medieval de Manresa cuando el núcleo central de Puigcardener, a causa de la naturaleza de su terreno, no podía expandirse más. La ciudad necesitaba una fortificación que le permitiera desarrollar el mercado semanal, motor económico de la Manresa medieval y dar protección a los ciudadanos. Es por este motivo que se articuló la ampliación de la villa en torno al mercadal (actualmente Plaça Major) y se fortificaron uniendo el Puigmercadal con el Puigcardener. Uno de los límites de esta fortificación era la Calle de Sobrerroca, las casas de la cual debían servir de muralla antes de que la ciudad creciera hacia la calle de Santa Llúcia, momento en el cual aparece la calle del Balç.
Todo este sector de la Manresa antigua, está edificado sobre la misma roca natural, tal como indican los topónimos de las calles, como por ejemplo la calle Sobrerroca o la misma calle del Balç, que hacen referencia a las construcciones encima de la roca o encima de un sitio rocoso y con fuerte pendiente, como en un escarpe. Esto explicaría el trazado estrecho y sinuoso de la calle, adaptada a las características del terreno.